lunes, 2 de noviembre de 2009

¿Entre todos y para todos? Tecnologías para el trabajo colaborativo


Módulo: Tecnologías para el Trabajo Colaborativo (TTC).

A lo largo de las distintas sesiones que integraron el módulo “Tecnologías para el Trabajo Colaborativo” hemos podido identificar los problemas centrales que implican pensar y experimentar las tecnologías en función del trabajo colaborativo.
Comenzamos nuestras reflexiones con una introducción a la problemática del conocimiento en red para luego avanzar hacia las formas tecnológicas de vida como formas de socialización e intercambio a distancia. Más tarde nos detuvimos a reflexionar sobre las leyes de funcionamiento que caracterizan a las redes y las desigualdades que suponen. Finalmente nos abocamos a abordar las cuestiones que hacen al diseño en red e identificar los alcances y límites que presenta el pasaje de la producción individual a la producción colaborativa-colectiva.
El pasaje de una red de Internet denominada 1.0 a su versión 2.0 supuso no solamente una evolución en el tipo de prestaciones y servicios disponibles para los consumidores de este medio, sino más bien una transformación en los modos de relación entre los sujetos y con ello la configuración de distintas comunidades que se asientan sobre la idea de los entornos colaborativos. Una expresión acabada de ello son las llamadas redes sociales que si bien no tienen su origen en Internet se han reconfigurado y expandido con la aparición de este medio. Una propuesta de topología de estas redes es la que creara Paul Baran a instancias de la descripción de la estructura del proyecto que más tarde sería Internet. Baran, considera así tres formas de organización de una red: la centralizada, la descentralizada y la distribuida. Tal y como se configuran las relaciones entre los sujetos estas tipologías difieren en cuanto a la existencia e importancia que adquieren sus núcleos. Mientras en la red centralizada resulta fundamental el núcleo del cual dependen todas sus extensiones, en la descentralizada se admite la existencia de una pluralidad de puntos nodales del que depende cada conjunto de extensiones y finalmente en la distribuida no existen centros o núcleos de dependencia sino que las vinculaciones se construyen bajo una forma más horizontal, simétrica e independiente.
Estas topologías no son inocentes sino que suponen la atribución de una jerarquía específica y con ella la centralidad, descentralidad o distribución de la información y sobretodo del poder.
El blog resulta una forma de diseño, producción y comunicación típica de la Web 2.0 en dónde se pone claramente de manifiesto el espíritu fundamental de una red distribuida. Ugarte (2007:44) señala al respecto “los blogs son sistemas personales, automáticos y sencillos de publicación que, al extenderse, han permitido el nacimiento del primer medio de comunicación distribuido de la historia…” En efecto, la red de blogs- blogfera- tiende a diluir la asimetría que se establece entre emisor-receptor y que fue característica de los medios de comunicación tradicionales. La fortaleza de esta red es que ha logrado disolver la capacidad de filtrado de la información de unos usuarios en desmedro de otros.
Los usuarios y creadores de blogs-bloggers- resultan, en algún sentido, promotores de un nuevo tipo de prácticas sociales y políticas que se basan en una idea pluriárquica de la circulación de la información y el conocimiento.
Más allá de estas consideraciones de David de Ugarte, no debemos dejar de considerar que la red se enmarca en un sistema social material en que si bien se han propagado algunas prácticas sociales distribuidas se caracteriza por una estructura descentralizada en la que son algunos los que detentan y administran la información y el conocimiento, es decir, el poder.
Otro producto disponible en la Web 2.0 que promueve las prácticas sociales de producciones cooperativas son los wikis, “una familia de programas y servicios utilizados para escribir de forma colaborativa”. Esta herramienta que se popularizó ampliamente con la aparición de Wikipedia – enciclopedia universal en red – suscitó en varios ámbitos pero especialmente en el educativo una serie de discusiones y debates acerca de la validez de la información allí contenida. Numerosas fueron las voces que al momento de referirse a esta fuente de consulta disponible en Internet cuestionaron la calidad de sus contenidos ya que la propuesta de esta tecnología wiki-wiki se basa en que los contenidos de la misma pueden ser elaborados por cualquier persona sin restricción alguna, ¿sin restricción alguna? Eso también está en discusión.
Sin embargo, no es este el punto central que aquí queremos abordar, sino más bien queremos detenernos en la experiencia misma de la producción de un texto con finalidades educativas a partir de la tecnología wiki: el desafío de la producción y el diseño en red.
En la actividad de la producción colaborativa de un texto en línea nos fue posible vivenciar varios aspectos conceptuales a los que se ha referido la bibliografía contenida en este módulo. Uno de los aspectos más relevantes, de índole antropológico ó sociológico si se quiere, resulta sin duda la necesidad de coordinación que busca todo grupo humano más acá o más allá de la red. Una de las primeras cuestiones que surgió en la elaboración del wiki texto fue la idea de formar un “grupo editor ad doc” que se ocupara de coordinar y dar forma al texto. Esta idea permite evidenciar hasta que punto las prácticas devenidas de una sociedad centralizada permea indefectiblemente las iniciativas de diseño y producción en red. Otro aspecto interesante y que viene asociado al anterior fue la constitución e identificación de activadores ó líderes sobre quienes se trataba en algún punto de delegar la valorización de opiniones producidas en el foro de este grupo, lo que produjo en cierta medida un leve grado de influencia de unos sobre otros. Y por último la diversidad tanto cuali como cuantitativa en la participación de los sujetos que integran un grupo. En base a esta mínima recopilación de una experiencia particular nos permitimos afirmar que resulta necesario propiciar en las iniciativas educativas de actividades de construcción colectivas de textos las siguientes condiciones: garantizar la diversidad de opinión, la independencia de las mismas y la distribución de conocimientos que aporten a su construcción colectiva.
Para concluir nos resulta prometedor retomar una frase del acápite perspectivas de la sesión cuatro del módulo: “Convengamos que la comprensión de las dinámicas internas y las propiedades externas de las redes sociales resulta fundamental para pasar del análisis al diseño, del pensamiento a la acción de la idea a la innovación”



Bibliografía
UGARTE, David de (2007), El poder de las redes. Manual ilustrado para personas, colectivos y empresas abocados al ciberactivismo. Disponible en http://www.deugarte.com/gomi/el_poder_de_las_redes.pdf
Rheingold, H. Multitudes inteligentes. La próxima revolución social. Barcelona, Gedisa, 2004.
Watts, Duncan; Seis grados de separación. La ciencia de las redes en la era del acceso. Barcelona, Paidós, 2006.